martes, 12 de mayo de 2009

IV Trofeo de Karate Villa de Colmenar Viejo

El próximo sábado 23 de mayo, a partir de las 10:00 horas, en el Pabellón A del Polideportivo Municipal Lorenzo Rico se celebrará la cuarta edición del Trofeo de Karate Villa de Colmenar Viejo.

Organizan el Club Bushido Colmenar, la Asociación Karate Shotokan Kimé de Madrid y el Servicio Municipal de Deportes de Colmenar Viejo.

Este año el campeonato se dirige específicamente a los competidores infantiles y juveniles, en las modalidades de Kumite y Katas.

Para más información se puede visitar la web del Club Bushido Colmenar en http://www.bushidocolmenar.com

lunes, 4 de mayo de 2009

Artículo de 1963 sobre Karate en el diario "El Mundo Deportivo"

Buscando en la hemeroteca del diario "El Mundo Deportivo" cual podría haber sido el primer artículo sobre Karate, encontré un artículo del año 1963 realmente curioso en el que se describe el Karate como "deporte mortal". El artículo se publicó en la página 7 de la edición del domingo 31 de marzo de 1963 y se puede consultar en la siguiente dirección:
http://hemeroteca.elmundodeportivo.es/preview/1963/03/31/pagina-7/932721/pdf.html.
A continuación podéis leer el contenido íntegro del artículo. Como veréis no tiene desperdicio.

EL KARATE DEPORTE MORTAL

Sólo la extraordinaria atención de los jueces puede evitar que esta faceta de la lucha sea de consecuencias desastrosas : : Es una variante del jiu-jitsu, judo, sumo y pugilismo : : Los pies sirven de fulminantes armas ofensivas

Tokio. (Especial para EL MUNDO DEPORTIVO, por Sakuji KEITO.)

Mis buenos amigos españoles están muy interesados en el momento actual del judo, bella faceta en la cual no existe peligro, por cuanto las acciones peligrosas apenas pasan de ser insinuadas. No hay accidentes mortales, pese a que podrían producirse, si los propios especialistas se lo propusieran, pero hay que mantener las reglas de cortesía y nobleza para el adversario. Pero lo que yo no esperaba es que los españoles quisieran saber lo que es el karaté, y con este objeto he compuesto este trabajo, para dar una idea general sobre esta clase de lucha que es auténticamente mortal, a menos que los karetistas se empleen con idéntica nobleza y amplitud de miras que los judokas, y la vigilancia extrema de los jueces mantengan en constante vigilancia los combates.

El karaté es una mezcla de jiu-jitsu, judo, sumo y hasta podríamos afirmar de sambo, lucha rusa, y también el pugilismo tiene muchos puntos de contacto, ya que emplea el saco de arena para entrenamiento de pies y puños, y algunos golpes semejan extraordinariamente a los que aplican los boxeadores. Los karetistas emplean para su combate las treinta y cinco partes del cuerpo más vulnerables, con objeto de reducir a su contrincante. Golpeando en alguno de ellos con precisión, pueden causar la muerte lenta o instantánea, por eso las peleas entre estos luchadores quedan reducidas al martilleo de dichos puntos, pero a varios centímetros de los lugares orgánicos que podrían causar la muerte en caso de acertar plenamente. No son demasiados los que se libran de ciertas parálisis e incluso de la locura según sea la zona donde recibieran los impactos del contrario. Un error puede ser fatal y para ello, los jueces deben estar continuamente sobre lo adversarios, para impedir una aproximación excesiva de golpes a los puntos vitales, pero así y todo se han producido consecuencias funestas por imprecisión...

Esta clase de lucha la crearon los misioneros budistas, con objeto de defenderse sin armas de los continuos ataques de que eran objeto, sobre todo en algunas emboscadas que les tendían los bandidos. También durante la última guerra, los habitantes de Okinawa debieron recurrir al karaté para hacer frente a las continuas agresiones de que eran víctimas por parte de los nipones, que habían prohibido a los lugareños el uso y empleo de las armas. Había que defenderse a manos vacías.

El karaté requiere un entrenamiento durísimo. La vestimenta es idéntica a la del judoka. Los cuidados del karetista le llevan a correr docenas de kilómetros con un pesado calzado de plomo, con objeto de fortalecer los pies, principal arma de combate que, después en la sala, ejercitan golpeando al saco de arena en prodigiosos ejercicios. Un golpe de éstos al mentón, puede causar la muerte instantánea. Estos luchadores no salen apenas del gimnasio donde consumen horas de entrenamiento, tanto de agilidad como de dureza y asimilación. Naturalmente, el karaté está controladísimo por las autoridades, que exigen la declaración de los clubs existentes, así como un completo informe de cuantas actividades se llevan a cabo en los mismos, remarcando aquellas que el karaté debe ser eminentemente defensivo, jamás ofensivo, más que en casos extremos...

Tokio está lleno de clubs y a ellos vienen para perfeccionar su técnica de todos los puntos de Asia, e incluso de Europa. También los norteamericanos gustan de aprender esta modalidad de lucha, que sin las debidas garantías puede causar la muerte al no bien preparado. Así se explican ciertos accidentes surgidos en diversos clubs americanos, al no haber comprendido y asimilado el auténtico espíritu del karaté.

Para documentarse en el mismo, los técnicos realizan exhibiciones en las que se demuestra palpablemente lo que puede y también lo que no se debe hacer en las peleas. Son verdaderos maestros en el arte de enseñar cómo puede matarse a un hombre con uno de los seis o siete impactos mortales que pueden prodigarse en un combate. Los cinco golpes preferidos son con el puño cerrado a la manera del pugilista, el canto de la mano a guisa de hacha sin corte, pero de máxima contundencia, el codo, algunos dedos, sobre todo el índice y anular y, por último, el más peligroso de todos, el pie. De ahí que en ciertas escuelas se simultanee el judo con el karaté para dotar de más elementos defensivos a los que se dedican a este par de modalidades de la lucha. Los niños han demostrado ser buenos alumnos.

En resumidas cuentas y suponiendo que a lo españoles les agrade saber cuanto afecta al karaté, puedo afirmarles que este deporte es tildado de arte mortal, y que en los bajos fondos nipones emplean los hampones para defenderse de los ataques de la policía, pero como esta, a su vez, está asimismo entrenada en esta modalidad y también en la del judo, casi siempre salen perdiendo lo delincuentes.

Este es el karaté, amigo lector español. Deporte mortal.